1. ¿Qué factor de riesgo identifica en este niño para el desarrollo de un trastorno de ansiedad por separación?
El factor de riesgo más determinante para la aparición de trastornos de ansiedad y trastornos depresivos, mucho más que el estilo educativo o la presencia de factores ambientales de diversa índole, es la existencia de antecedentes familiares de primer grado. El sexo masculino no es un factor de riesgo, ya que la ansiedad y la depresión se presentan con la misma frecuencia en ambos sexos en la edad infantil, y luego, en la adolescencia, son más habituales en mujeres. El orden en la fratría no ha mostrado ser un factor de riesgo, y tampoco el hecho de «obligar» a los niños a afrontar situaciones temidas; al contrario, esta actitud es terapéutica.
2. Todos los siguientes factores de riesgo están relacionados con la patología que presenta la paciente, excepto uno:
Todos los cambios ambientales que puede generar en la dinámica familiar el nacimiento de una hermana menor que además requiere cuidados especiales, así como la presencia del antecedente familiar de depresión en la madre y la vulnerabilidad de la niña debido a un temperamento previo caracterizado por inhibición y emocionalidad negativa, son factores que predisponen a la aparición de síntomas sugestivos de depresión (verbalizaciones negativas, síntomas regresivos...). En cambio, la incorporación del cuidador principal –en este caso, la madre– al mundo laboral durante la infancia temprana de la niña no ha mostrado ser un factor de riesgo de ningún tipo de trastorno psicopatológico.
3. Señale la afirmación que considere más correcta:
Este paciente tiene síntomas sugestivos de TDAH: es impaciente, su rendimiento es inferior al esperable para su capacidad, y además está desarrollando una posible desregulación emocional en la adolescencia. Parece que el padre ha tenido síntomas similares (lo denominan «carácter», pero probablemente sea también un TDAH). Los antecedentes de prematuridad y peso bajo son un factor de riesgo importante para el desarrollo de TDAH, así como el consumo de tabaco durante el embarazo, o de alcohol, sin que sea necesario que ambas sustancias se consuman a la vez. El riesgo de sufrir TDAH si existe un hermano gemelo monocigótico con TDAH se multiplica por 12-16; si es un familiar de primer grado el que lo padece se multiplica por 8 aproximadamente, y si es de segundo grado, por 2.
4. ¿Qué factores de riesgo han podido incidir en la patología del niño?
Como ya se ha señalado, ningún estilo educativo ni ningún tipo de relación familiar concreto inducen la aparición de un TEA; tampoco influyen el orden de nacimiento ni las vacunas. En cambio, sí constituyen factores de riesgo el consumo de algunos medicamentos, la exposición a determinados agentes tóxicos y la presencia de complicaciones como la obesidad, la hipertensión o las enfermedades autoinmunes (tiroideas o diabetes) durante el embarazo.
